5 meses...
La rutina mecánica de cada día apenas nos permite echarnos a un lado para ver el transcurrir de la vida. Vamos tan deprisa en este tren que las personas, los hechos, las realidades, van salpicándonos de un modo fugaz sin permitírsenos disfrutar completamente de todo lo que hacemos y sentimos.
Con esta rapidez, sin apenas abrir los ojos, nos damos cuenta que Jacobo ya ha cumplido 5 meses…
Ese proyecto de persona que llegó un día a casa ya es el dueño y señor de todo esto. Su mirada desconfiada dio paso a la mirada más limpia que haya podido ver jamás. Su fragilidad se ha tornado en la fortaleza de dos piernas que ya empiezan a empujar solicitando su espacio. Su dependencia absoluta va dando paso a un genio (muy familiar…) en el que las cosas las quiero “ahora y ya”. Su silencio se rompe con los primeros proyectos de palabras. Su seriedad adormecida va transformándose en sonrisa agradecida. Su quietud ahora es juego. Su vida se traduce a nosotros. Nuestra vida, es él.
A veces nos ahogamos al pensar que el día de hoy, ya no lo volveremos a vivir jamás. Su ternura, su genio, su risa, su llanto, su hambre, su sueño… mañana serán distintos a los de hoy, y su mirada será otra y sus juegos serán otros. Cada día es único e irrepetible.
Esa quizás sea la mayor amargura de ser padres. Verlos crecer. Ver que cada vez será más libre e independientes, que cada vez se molesten más por nuestras cosas, que empecemos a no saberlo comprender, que le intentemos imponer unas reglas que vayan en contra de su voluntad. Por mi… que se quedara siempre así. Con su despertar mágico, con su sonrisa cuando entramos por la puerta, con su respiración entrecortada mientras duerme, con su despertar a media noche en busca del chupete, con su ansia por coger el biberón y llevárselo a la boca, con su silencio curioso cuando papá y mamá hablan y que parece que va a empezar a opinar, con todas y cada una de sus cosas que lo hacen a él único.
5 meses de Jacobo. 5 meses de padres. Lo podremos hacer mejor, sin duda, se nos podrá criticar determinadas cosas, cierto. Pero lo que nadie nos podrá poner en duda es que va nuestro corazón en cada cosa que hacemos por él.
Sus energías son las que nos roba cada día…
Sigue así mi vida.
2 comentarios
Germaine -
Felicidades a Jacobo y muchos besos a todos. Germaine
Nati -